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Las hermanas de Madagascar, responsables de la animación litúrgica, esta mañana nos ayudaron a volver al tiempo ordinario, que es la trama de la existencia cotidiana, siempre extraordinaria por gozar de la presencia del Dios-con-nosotros, aquel Dios para quien nada es imposible.
Con esta certeza, que alimenta alegría y esperanza, iniciamos nuestros trabajos, tomando visión del texto elaborado por el gobierno general y después compartido con las superioras de circunscripción en el Intercapítulo de 2011. Se trata de la Visión de la Misión y de los Valores que sustentan nuestro apostolado. Serán la base del Proyecto apostólico continental.
Por lo tanto, después de una breve profundización sobre lo que es estudiosidad en el pensamiento de Alberione, recibimos la iluminada intervención de Sor M. Antonieta Bruscato, articulado en tres momentos:
- Hacer memoria de las líneas orientadoras de la congregación sobre la misión, con especial referencia a los criterios de la revisión del apostolado a la luz del carisma propuestos por el 9° Capítulo general, y de todo lo establecido en el Encuentro continental de rediseñación para el continente África-Madagascar.
- Puntualizar algunos aspectos importantes/urgentes surgidos, en los esquemas de los grupos de trabajo.
- Dar la palabra a las participantes para una confrontación constructiva y para expresar pensamientos, deseos y sueños acerca de la misión que el Señor nos confía en este “continente de la esperanza”.
El intercambio fue libre, rico y estimulante. Las premisas están todas. Y así, una vez más reunidas en los grupos, se trabajó con rigor y sano realismo en la concretización de las Áreas de acción que configurarán nuestro compromiso a corto y mediano plazo.
Las convergencias, ya muy evidentes en la jornada de ayer, deben llevar a un Proyecto compartido, verificable, pero también con visión de futuro. Mañana sabremos más…
Nos ha llegado la noticia de una violenta explosión que destruyó un edificio en la zona comercial de Nairobi. Hay «muchos heridos, pero se temen también víctimas». Para todos nuestra solidaridad y nuestra oración.